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Cultura

Edificio y terrazas Renschhausen, joya arquitectónica e historia de Tánger

En los inicios del siglo XX una empresa alemana, Sarger & Corner había dado inicio a las obras para construir un puerto en condiciones en Tánger.

Con las obras, se ganó terreno al mar surgiendo un amplio terraplén enfrente donde el contratista, que también estaba implicado en las obras del puerto, Adolf Renschhausen, levantó unos bellos edificios en estilo neobarroco alemán en la avenida España.

Los edificios fueron construidos entre 1905 y 1908 con un estilo neobarroco alemán, este inmueble de tres plantas. Se consideró uno de los proyectos más importantes de la ciudad a principios del siglo XX. Los balcones destacan por su forjado hierro, sus azulejos eran importados de Marsella contando con materiales de una gran calidad para aquella época.

La parte superior era una estructura decorada con ventanas ovaladas y techos inclinados en el extremo sur de la terraza realizados en 1923.

Los inmuebles se decoraron con dos coronas imperiales en la parte superior, en honor al káiser Guillermo II  (1859-1941) que visitó Tánger en 1905, un año antes de la histórica Conferencia de Algeciras en la que se crearon los protectorados para Marruecos, el francés y el español. Los coronas que portaban fueron destruidas con motivo de la II Guerra Mundial, en los años 40 del pasado siglo.

Los edificios contaban con dos partes, en  dos plantas había oficinas de compañías navieras y de seguros. La parte inferior junto a la calle Portugal, contaba con algunos cafés. Posteriormente en 1913 se abrió el Hotel Majestic. A la derecha de los edificios se encontraba un antiguo centro de compras francés, igualmente construido por el empresario entre 1911 y 1923.

También los edificios Renschausen servían para seguir el inicio de las carreras de caballos, que en esos iniciales años del siglo XX, reunían a un gran número de público, se iniciaban en la playa de Tánger y terminaban en las cercanías de Villa Harris. Los caballos provenían de los establos de Cases, en Gibraltar y de Jerez de la Frontera.

Las terrazas fueron uno de los más populares en ese periodo de los felices años 20, con salones de danza y baile, el inicio del cinematógrafo, sala de juegos…. En los años 30 llegó el ferrocarril a la avenida España, quedando la estación justo enfrente de los inmuebles Renschhausen.

Tras ser presentados a subasta los edificios fueron comprados por España en diciembre de 1949. Posteriormente, la primera planta de los edificios se transformó en la biblioteca española y Cámara de Comercio española, cuya sede se prolongó durante varias décadas.

Fue declarado patrimonio nacional para preservar el carácter multicultural que tuvo el Tánger internacional. En 2006 se procedió a la pintura de la fachada en los colores amarillo y blanco. En la esquina del edificio se encuentra la sede de la Asociación de Residentes y Comerciantes de Renschhausen que organiza actividades siendo un referente para distintas actividades además de preservar el inmueble.

Adolf Renschhausen

En cuanto al empresario alemán que le da nombre, Adolf Renschhausen (1867-1948)  hizo negocios a principios del siglo XX en Tánger y Larache. El empresario ayudó activamente en la urbanización del norte de Marruecos en aquella época.

Entre los años 1890 y 1914, fue un actor esencial para el desarrollo del sector industrial y económico de la ciudad. 

En 1890 el empresario argelino Lucien Bargeaud y el suizo Johann Reutemann eligieron a un joven consejero comercial, Adolf Renschhausen, como director de una sucursal en Tánger.

No obstante, Renschhausen rompió las relaciones con sus socios y así se convirtió en el único propietario de la sede tangerina desde el 10 de septiembre de 1906. 

Renschhausen adquirió 64.000 metros cuadrados de terreno y 2.500 metros cuadrados más delante de la playa, zona donde construyó los inmuebles que, al igual que las terrazas, llevan su apellido.

Con el inicio de las hostilidades de la Primera Guerra Mundial en el verano de 1914, todos los alemanes de la zona fueron detenidos y llevados a campos de concentración. El empresario fue acusado de espionaje a favor del Imperio alemán siendo condenado a 15 años, por lo fue internado en un campo en Argelia.

Después de la Primera Guerra Mundial, Alemania perdió propiedades en la ciudad y no contaba con ningún representante oficial.

No obstante, al cabo de los años se rehízo y de hecho, la Casa Renschhausen acabó con sucursales en Tánger, Larache, Tetuán, Casablanca y Rabat.

Posteriormente acabó como vicecónsul alemán en Larache donde falleció en 1948. En esa ciudad, entonces perteneciente al Protectorado español, tuvo su residencia en la que se llamaba popularmente ‘Cuesta del alemán’, actual avenida Zekalla. Defendió la presencia de judíos en la zona por lo que fue cesado por las autoridades nazis.

Asimismo mencionar que en la localidad alemana de Radebeul, existe una casa llamada 'Villa Tánger', nombrada así en honor al empresario alemán que fue su dueño de 1911 a 1927. Hoy es un monumento histórico con funciones de guardería infantil.

Como curiosidad, en Tánger existió un cementerio alemán y actualmente hay un centro alemán oficial donde se puede aprender el idioma.

Las terrazas son un testimonio de la historia de Tánger en la época internacional que a pesar del paso del tiempo y los avatares ocurridos en la ciudad del Estrecho se han podido conservar.

Son un elemento muy importante a nivel arquitectónico y como curiosidad, eran uno de los lugares preferidos del escritor español Juan Goytisolo (1931-2017)  cuando residió y visitaba la ciudad. 

Texto: Jesús Cabaleiro