Ola de calor: las autoridades advierten de la alta presencia de escorpiones y serpientes
El Ministerio de Salud y Protección Social ha confirmado que Marruecos registra miles de picaduras al año, la mayoría causadas por escorpiones y también por serpientes, alertando de la situación.
En concreto se cifran en más de 30.000 los casos anuales de picaduras, con una tasa que varía, según el año, en casos mortales desde el 1,2 al 0,2 por ciento.
Por este motivo ha realizado un llamamiento a la concienciación y prevención como pilares esenciales para combatir esta amenaza estacional debido a la intensa canícula.
En este sentido, el investigador especializado en políticas y sistemas de salud, Tayeb Hamdi, advirtió sobre las repercusiones de las intensas altas temperaturas que afectan actualmente a varias regiones marroquíes.
Estas olas de calor están provocando que escorpiones y serpientes salgan de sus escondrijos en busca de lugares más frescos, lo que hace que las viviendas, sobre todo en pueblos y zonas rurales donde estos reptiles son comunes, sean vulnerables a esta indeseada intrusión.
Hamdi explicó que aproximadamente el 70 por ciento de las picaduras de escorpión no ocurren en campos o espacios abiertos, como comúnmente se cree, sino en el interior de las casas, por lo que llama la atención sobre la gravedad de esta amenaza durante períodos de olas de calor extremo.
El experto señaló que los niños siguen siendo los más vulnerables a las picaduras de escorpión, lo que, a su juicio, hace necesario intensificar los esfuerzos de concienciación, ya sea mediante campañas directas o a través de los medios de comunicación, para alertar tanto a los niños como a sus padres.
Hamdi también destacó la importancia de adoptar medidas preventivas dentro de las casas, incluyendo sellar grietas y aberturas, revisar mantas y zapatos antes de usarlos y evitar dormir en el suelo, especialmente en casas de barro o cerca de áreas infestadas de escorpiones.
Una picadura de serpiente mata a un anciano
Un anciano agricultor falleció tras ser mordido por una serpiente venenosa mientras trabajaba en su granja en una aldea, en la comuna rural de Zoumi (40.000 habitantes), provincia de Uezán.
El hombre se encontraba trabajando en su campo, como de costumbre, cuando la serpiente lo sorprendió y picó, provocando que su salud se deteriorara rápidamente, falleciendo antes de llegar al centro de salud.
Este trágico incidente ha dejado a su familia y vecinos de la zona en un estado de dolor y tristeza, especialmente dada la recurrencia de tales sucesos durante el verano, cuando los reptiles venenosos aparecen en zonas rurales.
Texto: Jesús Cabaleiro