Tánger quiere un centro cultural hispano-marroquí en el Palacio Álava Esquivel de Vitoria
La ciudad de Tánger, propietaria del Palacio Álava Esquível en la capital vasca, Vitoria-Gazteiz, ha propuesto, a través de su alcalde Mounir Lemouri crear un centro cultural hispano-marroquí en este histórico inmueble.
Mounir Lemouri (PAM) desveló esta propuesta para que el edificio sea un puente cultural señalando que existe un acuerdo entre el Ayuntamiento de Tánger y el de Vitoria para desarrollar un proyecto destinado a reforzar la cooperación cultural entre ambas ciudades.
Tánger se enfrenta a grandes retos con este edificio del que es propietario, ya que adeuda al Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz 421.000 euros en multas y otros conceptos relacionados con el mal estado del palacio.
Un edificio cuyo estado de conservación es lamentable y se encuentra incluido desde abril de 2022 en la lista roja de ‘Hispania Nostra’ por ″riesgo de derrumbe” y ″grave peligro de desprendimientos” y que está con la amenaza de la expropiación forzosa.
Desde 2010 este Palacio, ubicado en el centro, ha padecido diferentes problemas con la propiedad del edificio, es decir, con Tánger. El Ayuntamiento de Vitoria tuvo que actuar de forma subsidiaria para evitar la caída de cascotes, y las solicitudes hacia la ciudad del Estrecho para exigir una actuación fueron constantes.
Lemouri defiende que hay que preservar el patrimonio arquitectónico común por lo que propone este proyecto de cooperación internacional citando que Tánger está dispuesta a resolver los problemas jurídicos y administrativos incluida la deuda existente.
Del mismo modo, expresó su deseo de alcanzar una solución entre ambas instituciones locales.
También declaró que actualmente las dos ciudades trabajan en la elaboración de planes técnicos para determinar los pasos necesarios para implementar el proyecto. Está previsto celebrar una reunión técnica entre representantes de las dos ciudades antes de finales de este año para desarrollar más los detalles del proyecto.
Con la llegada de la socialista Maider Etxebarria a la alcaldía vitoriana en 2023 se retomaron negociaciones y gestiones e incluso Lemouri se desplazó a Vitoria.
Historia del palacio Álava Esquível
El palacio es un edificio construido entre 1488 y 1535 entre las calles Herrería y Zapatería. Fue mandado construir por Pedro Martínez de Álava y María Díez de Esquivel, pero se terminó bajo la dirección de su hijo Diego de Álava y Esquivel (fallecido en 1562).
Es un edificio que ha sufrido varias modificaciones a lo largo de la historia, y se desconoce cuál era su aspecto original. Luce un supuesto reloj apresado a un navío inglés el 25 de junio de 1782. El reloj aún visible, se encuentra en mal estado de conservación.
En el siglo XIX sufrió una ampliación y en 1891 se derrumbó parte del ala norte.
El Palacio Álava Esquível ha tenido numerosos dueños. El penúltimo fue el Duque de Tovar, Ignacio de Figueroa y Bermejillo (1892-1953), quien, al morir en 1953 sin hijos, legó su herencia al Instituto Norteamericano del Cáncer y, en caso de que renunciara, a la ciudad de Tánger.
Los norteamericanos renunciaron y el Duque de Tovar cedió en 1953 todas sus posesiones al Protectorado español. En 1956 se independizó Marruecos y en 1960 Tánger se integró en el reino alauí.
Por este motivo, Tánger ostenta numerosas propiedades, por las cuales apenas se preocupa. La mayoría de los edificios que el Duque de Tovar entregó a Tánger son de carácter histórico y con un alto valor patrimonial, lo que se traduce en un importante coste de mantenimiento. Hace unos años Madrid compró a Tánger uno de esos edificios que estaba en ruinas.
De hecho, un hospital en Tánger lleva su nombre, Duque de Tovar.
Texto: Jesús Cabaleiro