La semifinal de la Copa del Trono que debía disputar el MAT aplazada por coronavirus
La Real Federación Marroquí de Fútbol (FRMF) anunció el aplazamiento de las dos semifinales de la Copa del Trono al domingo 1 de agosto, en vez del sábado 31 de julio, como se había anunciado. El horario se mantiene igual.
El Mogreb Atlético Tetuán (MAT) había solicitado el aplazamiento de la semifinal de la Copa del Trono, que debía disputar el sábado 31 de julio a las 21.30 horas, ante el campeón de la Botola, el Wydad de Casablanca en Marraquech.
El motivo es que cuenta con 13 casos de coronavirus en el club, que fueron positivos tras efectuarse las pruebas el pasado miércoles 28 en Casablanca, tras disputar el último partido de la Botola ante el RS Berkane, que perdió por 2-3 y supuso el descenso a la Segunda División.
Los afectados deben seguir el protocolo sanitario vigente en estos casos.
Posteriormente, el club envió un requerimiento a la FRMF para que, vista la situación, se cambie la fecha de las semifinales de la Copa del Trono que debían disputar el sábado 31 ante el Wydad de Casablanca en Marraquech.
La otra semifinal se disputará en Agadir entre el equipo de Segunda División, Raja Beni Mellal y el FAR Rabat a las 18.30 horas.
Al final el aplazamiento es tan solo de un día.
Descenso a Segunda
El descenso a Segunda División del MAT producido el pasado martes 27 constituyó un acontecimiento deportivo muy destacado. A pesar de sus títulos e historial, y el anuncio a inicios de temporada del propio presidente que aspiraba a estar entre los cinco primeros, lo cierto es que el equipo deja la Botola Pro por la puerta de atrás.
El conjunto rojiblanco acabó en la penúltima posición con 32 puntos, solo dos por delante del farolillo rojo y otro descendido, el Renaissance de Zemamra.
Los seguidores aún permanecen en estado de shock tras lo ocurrido. La afición se mostró muy insatisfecha con el desenlace atribuyendo el descenso a todos los entrenadores que pasaron en la temporada, nada menos que cuatro (Juan José Maqueda, Younes Belhamer, Jamal Dreidb, Toni Cosano) y lógicamente a la caída progresiva de los resultados, no hay que olvidar que los últimos cuatro encuentros del campeonato terminaron en derrota.
Tras 16 años consecutivos en la élite del fútbol marroquí, durante los cuales marcó hitos históricos, los más importantes: los dos títulos de Liga en 2012 y 2014, además de participar en el Mundialito de clubes disputado en Marruecos y clasificarse para la fase de grupos de la Champions africana.
Los seguidores mostraron su decepción e indignación a través de comentarios en las distintas redes sociales. En ellos se pide la dimisión del presidente, Mohamed Redouane Ghazi (el pasado marzo ya hizo esta petición la peña Matadores que preveía el desastre) y su directiva, mientras otros se preguntaban dónde estaba el equipo que ganó las dos Botolas y eliminó a uno de los grandes equipos y campeones africanos, el Al Ahly egipcio, en la Champions.
Mientras, había los que querían ser optimistas confiando en que la estancia en Segunda sea solo de un año y se pueda ascender rápidamente para “volver a la normalidad”, a la vez que otros señalan que seguirán con su amor al equipo aunque juegue “en regional”.
Otros recuerdan su larga historia, que es uno de los más antiguos de Marruecos, y que “volverá al lugar que se merece” y citan que no pudieron apoyar en su estadio, Sania Ramel, con público, desde que se inició la crisis de la pandemia del coronavirus, hace más de año y medio, “vagando por varios estadios”.
En esta situación se ha propagado la imagen del conductor del autobús del equipo llorando a lágrima viva tras conocerse el resultado de 2-3 ante el RS Berkane y el consiguiente descenso, animándolo a mantener ese mismo cariño por el equipo.
La situación es tan impactante que el propio club en su página web y redes sociales decidió usar el blanco y negro en sus imágenes y fotos, además de una banda en negro para mostrar su tristeza y pesar ante sus aficionados.
Texto: Jesús Cabaleiro