Protestas por la derivación de pacientes al hospital Saniat Ramel de Tetuán
Numerosos vecinos de Tetuán y el resto de ciudades vecinas, como Chauen, Uezán y Rincón (M'diq) reclamaron la necesidad de trabajar para solucionar el problema de la ausencia de reanimación en los hospitales comarcales, y que motiva derivar a los pacientes al hospital regional Saniat El Ramel.
Este desplazamiento crea problemas y conflictos a médicos y enfermeras, además de la controversia por los estándares de orientación y capacidades del tratamiento que están disponibles para cada hospital regional.
Hay un expediente especial enviado al Ministerio de Salud para paliar el déficit de los servicios de ambulancias que transportan enfermos y heridos entre una ciudad y otra, y desde las zonas rurales a los hospitales públicos.
En este sentido, se pide la colaboración del consejo regional Tánger-Tetuán-Alhucemas en un programa para el establecimiento de alianzas con los municipios para proporcionar un número suficiente de ambulancias y equiparlas adecuadamente.
Sobre todo es necesario en los casos urgencias médicas y para seguir la coordinación entre la ambulancia y el personal médico y de enfermería, y los servicios de urgencias que los reciben en los hospitales públicos.
Los problemas de derivación de pacientes en Tetuán, Rincón (Mdiq) y Chauen dan lugar a un intercambio de acusaciones, en caso de errores médicos o sospechas de negligencia, como ocurrió en varios casos.
Entre ellos la muerte de un niño por un error médico en el Hospital Mohamed VI de Mdiq, como consecuencia de las complicaciones de una simple operación de extirpación de las amígdalas, y la muerte de un motociclista, tras sufrir un accidente, y que fue derivado al hospital de Tánger, a consecuencia de una hemorragia interna, entre otros casos llamativos, aunque circulan otras denuncias por redes sociales.
De este modo, el proceso de orientación entre equipos hospitalarios y urgencias debe estar sujeto a criterios claros, para la responsabilidad y rendición de cuentas.
Es necesario conocer el tratamiento ofertado en cada hospital, la especialización médica y el equipamiento disponible, para evitar involucrar al paciente en conflictos y problemas de organización médica que no le conciernen, pues acude al hospital para ser atendido, soportando además el desplazamiento del viajes y los onerosos gastos materiales que conlleva.
En este sentido, se quiere movilizar a las autoridades competentes para mejorar los servicios de salud, las condiciones de recepción de pacientes en el hospital y que se beneficien de su tratamiento médico.
Hay que recordar que un pasado informe de 2017 de la red marroquí para la defensa del derecho a la salud recogía que las urgencias en los hospitales marroquíes están saturadas un 144 por ciento.
Texto: Jesús Cabaleiro