Diario Calle de Agua

España - Marruecos

Sociedad

Tánger sigue aumentando la deuda con el Palacio Alava Esquivel de Vitoria que podría expropiarse

El Palacio Alava Esquivel de Vitoria-Gazteiz, propiedad de la ciudad marroquí de Tánger, alcanza una deuda acumulada de más de 310.581 euros (3.431.550 dírhams) como consecuencia de las ocho multas, recargos e infracciones existentes por su faltas en su mantenimiento.

Esta es la suma de los incumplimientos de la ciudad del Estrecho mientras el actual alcalde de Tánger, Mounir Lemouri, no está dispuesto a hacer ninguna acción para que cambie el actual statu quo.

La estrategia municipal en Vitoria es que, llegado al máximo de diez sanciones, quedarían otras dos, el Ayuntamiento de la capital vasca podría iniciar el proceso de expropiación del histórico inmueble de la calle Herreria.

En todo caso, habrá que esperar al resultado de las elecciones municipales del 28 de mayo donde el cabeza de lista del partido mayoritario, el PNV, renueva su cabeza de lista ya que Beatriz Artolazabal sustituye a Gorka Urtaran, alcalde desde hace ocho años, desde 2015.

La formación Elkarrekin-Podemos, actualmente con tres ediles, pide la expropiación tras detectar nuevos riesgos de desprendimiento. El edificio ubicado en el casco antiguo de la capital vasca está en muy mal estado y lleva más de siete años con redes protectoras externas.

Su rehabilitación total se estima en alrededor de un millón de euros, cantidad que es imposible para Tánger, ni tan siquiera con un proyecto de inversión, tras denegarse en el pasado la licencia para convertirlo en hotel.

Tánger está dispuesto a seguir acumulando multas y sanciones, por lo que va camino de expropiación en beneficio de la capital vasca. De hecho, la ciudad marroquí dejó la gestoría que le llevaba todos los trámites sobre este inmueble.

Aunque en 2018 la prensa marroquí mencionó el posible acuerdo entre Tánger y Marruecos para que la ciudad cediese simbólicamente al reino alauí el palacio y luego este lo cediera al estado español, lo cierto es que la idea no cuajó y está descartada.

El Palacio Álava Esquível es un inmueble actualmente habitado en diez de las 16 estancias, por lo que hay personas que permanecen en alquiler a pesar del grave deterioro del mismo.

La asociación en defensa del patrimonio 'Hispania Nostra' incluyó en abril de 2022 al edificio en la lista roja por ‘Grave Peligro de Desprendimientos’.

Historia

El Palacio Álava Esquível fue construido en el siglo XV, entre 1488 y 1535. Fue mandado construir por Pedro Martínez de Álava y María Díez de Esquivel, pero se terminó bajo la dirección de su hijo Diego de Álava y Esquivel (fallecido en 1562).

El inmueble ha sufrido muchas modificaciones con el paso de los siglos y se desconoce cuál era su aspecto original.

Es uno de los edificios más emblemáticos del casco histórico vitoriano. Cuenta con un reloj apresado a un navío inglés el 25 de junio de 1782. El reloj aún es visible, aunque se encuentra en mal estado de conservación.

En el siglo XIX sufrió una ampliación y en 1891 se derrumbó parte del ala norte.

El último de sus propietarios fue el Duque de Tovar, Ignacio de Figueroa y Bermejillo (1892-1953), quien, al morir en 1953, cedió todas sus posesiones al entonces Protectorado español en Marruecos. De hecho, un hospital en Tánger lleva su nombre, Duque de Tovar.

Tres años más tarde, en 1956, se crea el Reino de Marruecos y en 1960 la hasta entonces ciudad internacional de Tánger se integra en la nación.

Texto: Jesús Cabaleiro