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Un informe del SNPM analiza el estado de la libertad de prensa en Marruecos

Un informe sobre ‘La realidad de la libertad de prensa en Marruecos’ registró que la situación de los periodistas continuó deteriorándose y fueron sometidos a agresiones físicas debido a su práctica profesional, así como los casos por vía penal en su contra, en vez de aplicar la ley de prensa y publicaciones.

El informe, elaborado por el Sindicato Nacional de Prensa Marroquí (SNPM), estudió la realidad de la libertad de prensa en dos años, desde marzo de 2019-2021, y apuntaba al aumento de la situación de fragilidad entre los periodistas, con su incremento debido a la pandemia de Coronavirus y el estado de emergencia sanitaria, registrando una serie de problemas relacionados con salarios, compensaciones, contratos laborales, nivel de protección social y libertades sindicales, entre otros.

El informe también se centró en una serie de dificultades que enfrentan los periodistas para obtener información, a pesar de la existencia de una ley que regula y enmarca este tema, así como la dificultad en el acceso de los periodistas a la información.

El sindicato señaló una serie de ataques a la libertad de prensa y a periodistas, incluido el reproche a periodistas por publicar noticias veraces, el seguimiento del periodista encarcelado Omar Radi por un tuit sobre la reacción a las sentencias de los activistas del Rif, y el caso de Suleiman Raissouni, quien fue condenado en algunas plataformas digitales, antes de que el tribunal dictara sentencia.

El texto también registró que los periodistas fueron sometidos a agresiones físicas durante el desempeño de sus funciones, especialmente fotógrafos, por parte de la fuerza pública durante las protestas, o por parte de ciudadanos, además de los ataques a algunos periodistas por campañas de difamación, calumnia y difusión de rumores sobre ellos, después de publicar investigaciones profesionales.

El SNPM destacó que las violaciones más destacadas afectan a la libertad de prensa y el recurso a la ley penal contra periodistas como base para el seguimiento en los casos en los que se supone que se debe recurrir a la ley de prensa y publicaciones. También, la continuación de las agresiones físicas que, en ocasiones, se acompañan de amenazas, incitación a la violencia y ciberacoso y en otros casos, la destrucción de cámaras del equipo de los fotoperiodistas y cámaras.

Durante la pandemia, la característica más destacada fue la violación de la libertad de prensa y restricciones del trabajo de los periodistas, con el malentendido de funcionarios encargados de hacer cumplir los derechos sobre la naturaleza del trabajo de los periodistas, lo que dio lugar a algunos ataques esporádicos.

El informe mencionó que los intereses del Ministerio del Interior recurrieron a un procedimiento inaceptable al inicio de la pandemia, que fue la generalización de que el periodista debía obtener un permiso administrativo para poder viajar de noche, en el ejercicio de sus funciones, lo que constituye una especie de censura previa, ya que contradice la naturaleza del trabajo del periodista marcado por la urgencia. Tras la intervención del Consejo Nacional de Prensa (CNP) y el SNPM, este procedimiento se revirtió.

También se señaló el intento del Gobierno de aprovechar el estado de emergencia sanitaria para aprobar el proyecto de ley 20.22.

El texto concluyó presentando una serie de recomendaciones, entre las que se encuentran la mejora de los textos legales relacionados con la labor periodística, y  el traslado de los casos relacionados con la prensa, publicación y opinión de las leyes penales a la Ley de Prensa y Publicaciones.

El informe recomendó que se amplíe el uso de la Ley de Prensa y Publicaciones para incluir a todos los que puedan ser objeto de seguimiento por su expresión de opinión o difusión de información por cualquier medio, en el respeto del principio de legalidad.

Texto: Jesús Cabaleiro