Aumento de suicidios en la región Tánger-Tetuán
El tema del suicidio deja un estado de conmoción en los habitantes de la región Tánger-Tetuán ante el evidente aumento de casos con cinco en apenas cuatro días, por lo que existe una preocupación social.
En Marruecos según datos de 2016 se suicidaron un total de 1104 personas, 703 mujeres y 401 hombres, lo que supone una tasa del 2,9 por cien mil habitantes.
Así, un guardacoches de 30 años acabó recientemente, el viernes 30 de octubre, con su vida en una calle principal en Tánger colgándose de un árbol.
El incidente se produjo cerca de la mezquita Badr, donde el joven atara una cuerda y se colgara de un árbol en una escena trágica y dolorosa que dejó en shock a las personas que la contemplaron.
El lugar era muy concurrido y pasaban numerosas personas y medios públicos de transporte.
El miércoles 4 de noviembre un joven de 20 años puso fin a su vida de una manera que los testigos describieron como impactante, en el complejo residencial ‘Diyari’ en Tánger.
Según algunas fuentes, el joven de 20 años era natural de la ciudad de Uezán y cursaba sus estudios en la Escuela Nacional de Negocios y Gestión de Tánger.
Asimismo, según las mismas fuentes, el estudiante se arrojó desde la azotea del edificio residencial en el que compartía piso con su hermano, en circunstancias desconocidas, ya que no padecía problemas sociales ni trastornos psicológicos, lo que dejó un gran trauma entre sus vecinos y familiares.
Del mismo modo, una joven puso fin a su vida de una manera que los testigos describieron como trágica, en el distrito Benkirane de Tánger.
Según fuentes cercanas, la joven de 26 años se arrojó desde el tercer piso de la casa de su familia en el mencionado barrio, dejando una gran conmoción y dolor entre familia y vecinos.
Las mismas fuentes sugirieron que la causa del suicidio se debió a los trastornos psicológicos que sufrió durante su vida, ya que buscaba terminar con su vida afectada por diferentes crisis psicológicas.
Tetuán
El viernes 30 de octubre, un hombre casado de 60 años y padre de varios hijos puso fin a su vida colgándose en la rama de un sauce en la comunidad de Bani Yadr, en la región de Tetuán.
Los motivos del suicidio siguen siendo desconocidos, ya que el cadáver del fallecido fue encontrado colgado en el árbol.
El fallecido de nombre Mustafa, solía trabajar como guardia en uno de los tanques de agua de la zona, y vivió, durante su vida, condiciones muy difíciles.
Chauen
También se encontró el cadáver de una persona colgando de una rama de un olivo, en la carretera que conduce al centro de Sharafat, en la comunidad de Bni Darkoul, en la provincia de Chauen.
Según fuentes locales, el asunto está relacionado con un joven de Bni Rzine de la misma región, que en los últimos tiempos antes de su muerte sufría algunos trastornos mentales.
En el mismo contexto, las mismas fuentes informaron que el interesado desapareció cinco días antes de su suicidio, ya que se encontraba en Tánger, cuando tomó un taxi rumbo a Bni Rzine, por lo que ni se sabía nada de él, antes de ser encontrado sin vida en medio del asombro de sus familiares cercanos.
En todos los casos sucedidos, se abre una investigación para determinar las circunstancias del suicidio, así como identificar las causas, luego de que fueran requeridas la policía judicial y a la autoridad local.
El incremento de suicidios en la región norte, y en especial, en Chauen, motivaron que en marzo de 2019 se produjeran unas jornadas monográficas en la localidad para analizar y concienciar sobre el suicidio que ha aumentado de forma alarmante. A este encuentro asistieron líderes religiosos, imanes, que aportaron sus opiniones y reflexiones.
Texto: Jesús Cabaleiro