Cafés Carrion y su muñeca, símbolo de la historia de Tetuán
Cafés Carrion es considerada una de las empresas de café más antiguas de Marruecos, ya que cumple el centenario de su fundación de la mano del maestro tostador de semillas finas de café más famoso del norte de Marruecos y de toda España, Manuel Carrión López, la personalidad que dejó claras huellas en los productos del café “Carrión”, exactamente a partir del año 1924 en Tetuán, la Paloma Blanca.
Desde esa fecha, la distintiva marca de café Carrion ha adquirido una singularidad, distinción y originalidad que se ha transmitido de generación en generación, hasta convertir la histórica marca en un icono que encarna la identidad visual y el capital simbólico e histórico de su imagen institucional a lo largo de todas esas épocas.
Se puede decir que muchos de los recuerdos de los tetuaníes del café Carrion son positivos, y el más bello de ellos es la de aquella encantadora muñeca expuesto en la fachada de cristal del café más antiguo cerca del histórico cine Español, levantado en 1916, en el centro de Tetuán.
La muñeca de café Carrion en Tetuán fue más afortunada que otros recuerdos históricos de la ciudad que han desaparecido, como la zapatería 'Rex', los cines que ya no están, el tren de Ceuta, y el tranvía eléctrico de la etapa del Protectorado Español.
Mientras, la maravillosa muñeca sigue moliendo sus granos con todo amor, cariño y ternura, a salvo de las fluctuaciones del tiempo.
La muñeca de café Carrion no sólo era conocida por su fragante olor a café, cuyo aroma cautivaba a todos los transeúntes que cruzaban la calle del cine Español, hasta llegar al cine Monumental, sino que también estaba asociado a la impresionante belleza de Tetuán y al fino gusto andalusí, y esto se evidencia claramente a través de su ropa.
La lujosa muñeca, con sus elegantes complementos, lucía un auténtico pañuelo sevillano, como si atrajera tímidamente a los transeúntes. quienes quedaban extasiados por su hermosa apariencia, a través de la fachada de vidrio.
Lo cual evoca el poeta sirio Omar Abu Risha (1910-1990) y sus versos:
″Dime, oh hermosa mujer, ¿quién eres y de qué fuente se extendieron y crecieron las ramas? Pensé que estabas por encima de las genealogías del desierto, elevándose en lo alto”.
La muñeca de café Carrion, a través de su maravilloso molinillo, aparece como si fuera una dama de bondad y belleza, proveniente de la mitología griega, esparciendo con suavidad y calma el encantador aroma del auténtico sabor del café y su fragancia que fluye por las calles, callejones y caminos de la Paloma Blanca.
Con el paso de los días, semanas, meses, años y décadas este agradable olor formó un estado simbólico que inspiró el imaginario colectivo de los vecinos de Tetuán y sus alrededores, y dejó huellas imborrables en la memoria común porque el café Carrion no son sólo semillas tostadas, es algo más profundo que una bebida que se degusta.
El café Carrión es historia de Tetuán: son recuerdos del pasado de una buena etapa que contiene muchos significados, valores e hitos históricos de la ciudad.
Cuando una persona bebe una taza de café por la mañana, ya sea en una cafetería o en casa, consume el producto como sustancia, pero los significados simbólicos, los sentimientos y el estado emocional permanecen grabados en su mente para siempre, y así surge la conexión con algunas cosas y lugares.
La muñeca de café Carrion, sobrevivió a la brutal Guerra Civil Española, a la Segunda Guerra Mundial, al período de conflicto de la Guerra Fría, a las crisis económicas, y también a las “marcas” modernas y a la era de la velocidad, la tecnología y la competencia barata.
Desde luego merece ser inscrita entre el patrimonio inmaterial de Tetuán y de la región del norte de Marruecos como algo indispensable. La memoria debe ser preservada con el máximo respeto, porque las personas son pasajeras, pero la maravillosa muñeca quedará grabada en la memoria colectiva. de Tetuán y de la región norte para siempre.
La empresa Cafés Carrion es un símbolo de Tetuán y una referencia nacional ya que el café es importante en Marruecos.
Un proverbio árabe del siglo XVII señala: “El café, bébelo sin remordimientos. Su aroma quita los nervios y su consumo los problemas de la vida cotidiana”.
De hecho la palabra árabe ‘qahwa’ para designar al café proviene de la provincia de Kaffa en Etiopía y se transforma en ‘qahvé’ en Turquía y de allí salta a Italia como ‘caffé’ para pasar al español café.
Las dos principales variedades de café son la Robusta (tres veces más de cafeína y un sabor amargo) y la Arábica (menos cafeína y sabor ácido y afrutado), siendo la más cultivada en el mundo.
Texto: Jesús Cabaleiro