Mezquita y dulces sirios en Tánger
La conocida como Mezquita Siria es una de las mezquitas más antiguas de la ciudad del Estrecho.
Además cuenta con un gran simbolismo para los vecinos de Tánger, dada la presencia del jardín que la rodea y del barrio en el que viven muchas familias de origen sirio.
La mezquita siria se encuentra en el centro urbano, concretamente en un barrio que lleva el mismo nombre, se cree que deriva de la presencia de varias familias de nacionalidad siria.
El ambiente del Ramadán en Tánger es uno de los factores que animan a los vecinos a acudir a la mezquita siria, a rezar en sus espacios exteriores y los jardines que la rodean, al aire libre.
Esta mezquita cuenta con un amplio patio exterior que proporciona a los fieles condiciones confortables frente a las altas temperaturas y es conocida como jardines sirios o de la plaza de la Liga Árabe (Al Jamaa Al Arabia).
La mezquita siria es un edificio religioso, construido por la familia Tatari Al-Halabi, una familia siria que vive en la ciudad desde hace más de 55 años, y supuso un regalo 'simbólico' a Marruecos.
La construcción de la mezquita se produjo tras la participación de las fuerzas marroquíes en el frente del Golán sirio en 1967, en la llamada Guerra de los Seis Días, y sirvió para fortalecer los lazos de hermandad entre los pueblos marroquí y sirio.
La mezquita fue construida en el estilo arquitectónico levantino de la ciudad siria de Alepo, con un minarete de carácter oriental; el arquitecto que la diseñó estaba residiendo ya en Tánger cuando estaba bajo la soberanía de la administración internacional (1912-1956) aunque su construcción data de 1975. Está considerada una de las diez más destacadas de todo Marruecos.
Muchos en Tánger consideran la mezquita siria como un símbolo de invocación de los lazos de hermandad con el pueblo sirio. Precisamente, tras la guerra civil siria (2011-2020) fueron numerosos los que se desplazaron y llegaron a la ciudad del Estrecho, aumentando así el número de sirios que residen en Tánger y localidades cercanas como Asilah (Arcila).
Por otra parte, muchas familias están interesadas en los distintos tipos de dulces de origen sirio. Así lo demuestra la gran demanda en la venta de este tipo de dulces, en distintas pastelerías especializadas.
Hay una creciente demanda de dulces sirios durante el Ramadán, especialmente Baklava (pastel de pistachos o nueces trituradas distribuida en masa filo), Sesamiya (semillas de sésamo) y Qatayef o Katayef (postre de crepes o masa dulce relleno de crema de pistachos o nueces).
Texto: Jesús Cabaleiro