Protestas por la falta de medios en el rural marroquí tras morir tres menores por picaduras de escorpión
Tres muertes de menores en distintos puntos de Marruecos han puesto en evidencia la falta de medios sanitarios en zonas rurales ante la picadura de escorpiones.
Una niña de diez años murió en el centro hospitalario regional de Sidi Kacem después de un tremendo viaje por parte de la familia para intentar salvarla.
Un responsable de la Liga Marroquí para la Defensa de los Derechos Humanos en Uezán, Noureddine Othman, afirmó que los hechos pasaron en la comuna rural de Ounnana, en la provincia de Uezán, donde la niña fue picada por un escorpión.
Entonces la familia de esta comuna rural (12.800 habitantes) tuvo que luchar contra el tiempo para salvar a su pequeña de la muerte después de haber sido picada por un escorpión, viéndose obligada a recorrer numerosos kilómetros con la esperanza de salvarla.
La familia se trasladó inicialmente al hospital regional Abu Al-Qasim Al-Zahrawi (nombre del médico andalusí Albucasis, 936-1009) de Uezán en un duro, arduo y doloroso viaje, donde la pequeña recibió los primeros auxilios, pero luego en el viaje de vuelta a casa, el estado de la niña empeoró rápidamente a consecuencia del veneno que invadió su pequeño cuerpo, por lo que la familia se vio obligada a trasladarla esta vez al centro de salud cercano de la comuna rural de Teroual.
Ante la falta de soluciones en dicho centro de salud la familia se vio obligada a trasladarla fuera de la región de Uezán, en concreto, al hospital Jorf El Melha de la provincia de Sidi Kacem, haciendo un último viaje a Sidi Kacem, donde la pequeña murió, regresando a su ciudad natal para ser enterrada en medio de una profunda tristeza entre la familia y todos los vecinos.
El dirigente de la ONG señaló la incapacidad del estado en este caso mientras, paradójicamente, se prepara y anuncia grandes inversiones para organizar eventos deportivos de fútbol continentales e internacionales de alto nivel como el Mundial 2030.
Othman declaró: “No exigiré la apertura de una investigación, ni responsabilizaré a nadie por la muerte de esta niña inocente, porque ya sabemos la respuesta y también sabemos muy bien el motivo de las continuas muertes como resultado de la exposición a picaduras de escorpión”.
Otras dos muertes
Pero antes, también una picadura de escorpión mató a dos niños en la provincia de Guelmim, uno de nueve años y una niña de tres, como consecuencia de dos incidentes separados, en las comunas rurales de Abaynou e Ifrane Atlas Saghir, en la provincia de Guelmim.
Las dos víctimas fueron trasladadas al Hospital Regional de Guelmim para recibir tratamiento, de allí fueron remitidos al Centro Hospitalario Hassan II de Agadir, donde ambas fallecieron.
Los dos incidentes provocaron una serie de reacciones de protestas, la mayoría de las cuales vincularon la muerte de los dos niños a la falta de un sistema de salud adecuado en el Hospital Regional de Guelmim.
Por este motivo se derivan los casos al hospital de Agadir, por lo que los ciudadanos exigen dotar a la región de Guelmim-Río Noun de todas las capacidades que contribuirían a mejorar la oferta sanitaria sin desplazarse y garantizando así mejores condiciones de tratamiento capaces de salvar estos casos críticos.
Por su parte, una fuente oficial del hospital regional de Guelmim negó que hubiera habido negligencia por parte de los equipos médicos y sanitarios en el tratamiento de los dos niños por la picadura de un escorpión.
El mismo portavoz explicó que “el primer caso relacionado ingresó en el hospital de Guelmim a las nueve de la noche del 19 de agosto y se encontraba en un estado muy crítico como consecuencia de la exposición a tres picaduras de escorpión en la cara. mano y oreja. Tras ser sometido al protocolo de tratamiento aplicable, sin embargo, el deterioro de su estado de salud obligó a su traslado al Hospital Hassan II de Agadir, ya que contaba con servicios sanitarios de tercer nivel”.
En cuanto al segundo caso, la misma fuente informó que se trataba de una niña de Ifrane Atlas Saghir. Fue picada por un escorpión el 20 de agosto a las siete de la tarde y fue trasladada al centro cercano de Bouizakarne (14.200 habitantes) y de allí al hospital regional de Guelmim, donde ingresó a las dos de la madrugada.
La misma fuente destacó que el personal médico supervisó la situación de la niña en cuestión al protocolo de tratamiento y los exámenes necesarios, los cuales revelaron que presentaba dos problemas, el primero renal y el segundo a nivel cardíaco, lo que motivó redirigirla al Hospital de Agadir.
Los motivos de las dos muertes fueron la grave repercusión en el cuerpo provocada por la picadura y el retraso en el transporte al hospital.
Protestas
Con estos antecedentes, varios jóvenes de Ifrane Atlas Saghir, en la provincia de Guelmim, se reunieron en una protesta espontánea, el lunes 26 de agosto, frente al centro de salud destacando el sufrimiento de los habitantes por la ausencia de un médico permanente, que provoca la falta de servicios médicos para los ciudadanos y las muertes por veneno de escorpión.
La protesta espontánea se produjo a raíz del “doloroso incidente” de la muerte de la niña Khadija por la picadura de un escorpión el viernes 22 de agosto de 2024, achacándolo a la falta de los cuidados médicos necesarios y de los sueros utilizados en el protocolo de tratamiento para estos casos en el centro de salud de la comunidad, que sufre ya más de ocho años de ausencia de un médico permanente, ya que solo hay un médico un día a la semana.
En su protesta espontánea, los manifestantes enarbolaron consignas y carteles como “Sin médico se pierden vidas y se silencian voces”, “No hay salud en nuestro país, el abandono siempre está presente” y “La pérdida de la niña Khadija no es simplemente un accidente, sino un crimen por el que los responsables deberían ser juzgados’.
Otros carteles señalaban: “¿Quién curará las heridas de Ifrane?” ,“El médico ausente, la conciencia muerta”, “El traslado de un centro de salud a otro... así garantizamos una muerte más rápida”.
Hay voces que piden a los dirigentes políticos que asuman todas sus responsabilidades y aboguen por dotar al centro de salud de las vacunas necesarias y de un médico cualificado y permanente, así como a dotar una ambulancia de todo lo necesario para salvar las vidas de los pacientes y acabar con la marginación y exclusión de la población.
El Ministerio de Sanidad marroquí incluso realizó una campaña para distribuir sueros antivenenos en diferentes centros de salud, el problema es que no llegan a muchas zonas rurales.
La recomendación oficial del Ministerio de Salud marroquí, en caso de picaduras, es llevar con la mayor presteza a la persona afectada por el veneno al hospital para que reciba tratamiento, pero la realidad es que muchos están a cientos de kilómetros existiendo una falta evidente de recursos en los pequeños centros rurales sanitarios para hacer frente a las picaduras de escorpiones, lo que provoca la muerte de cientos de personas cada año.
Además, la subida de las temperaturas durante este verano ha producido un incremento de escorpiones y serpientes en diferentes regiones donde se superan los cuarenta grados de temperatura lo que agrava el problema.
Texto: Jesús Cabaleiro