El retraso en la finalización del proyecto de duplicación de la Carretera Nacional N-2, que une Tetuán y Chauen, sigue provocando la protesta y descontento generalizado entre los residentes de la zona que son usuarios de la vía.
Las obras del proyecto comenzaron en 2015, pero algunos de sus tramos todavía siguen en mal estado y suponen un gran desafío para el tráfico, que afecta especialmente a los conductores que trabajan en el transporte de pasajeros y mercancías.