La terminal de autobuses de Asilah (Arcila), se ha convertido en una ‘estación fantasma’, según señalan los usuarios que recuerdan que apenas han pasado cuatro años desde su entrada en servicio.
A pesar de las grandes expectativas generadas que acompañaron la inauguración de esta estación y los discursos inaugurales, en febrero de 2020, que la citaban como un instalación ″de nueva generación” lo cierto es que la terminal no logró el objetivo deseado, prevaleciendo el estancamiento.